El cerebro humano es una estructura muy compleja, la cual ha evolucionado a lo largo de millones de años para permitirnos sobrevivir, adaptarnos y prosperar en nuestro entrono. Lo cierto es que podemos identificar tres tipos de cerebro que describiremos a lo largo del artículo, el cerebro reptiliano, el cerebro límbico y la neocorteza. ¿Nos acompañas?

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Tipos de cerebro

El cerebro, compuesto por miles de neuronas interconectadas, es el centro de control de las acciones, pensamientos y emociones. Sin embargo, cada tipo de cerebro desempeña un papel en la biología y comportamiento, por lo que comprenderlos ofrece una visión más profunda de lo que significa ser una persona humana. A continuación, veamos cuáles son las características de cada tipo de cerebro.

Cerebro reptiliano

El cerebro reptiliano, también conocido como el cerebro primitivo, es la parte más antigua del cerebro. Este se encuentra en la base del cerebro y está involucrado en funciones básicas de supervivencia, como la respiración, la frecuencia cardíaca, la temperatura corporal y los instintos de supervivencia.

De hecho, esta región del cerebro se desarrolló en los primeros vertebrados, como los reptiles, y es responsable de respuestas instintivas y automáticas.

Cerebro límbico

El cerebro límbico es la siguiente etapa en la evolución cerebral y se desarrolló en mamíferos superiores, como los placentarios. Esta región incluye estructuras como el hipotálamo, el hipocampo y la amígdala. Esto significa que este tipo de cerebro se encarga de regular las emociones, la motivación, la memoria y el comportamiento social.

Por lo tanto, el cerebro límbico es responsable de las respuestas emocionales y de formar recuerdos que influyen en las acciones y decisiones futuras.

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Neocorteza o cerebro pensante

La neocorteza, también llamada cerebro pensante, es la parte más reciente en la evolución del cerebro, así como es característica de los mamíferos más desarrollados, especialmente los humanos. Esta región abarca la mayor parte de la corteza cerebral y está asociada con funciones cognitivas superiores, como el pensamiento racional, la planificación, el lenguaje, la toma de decisiones y la conciencia de uno mismo.

Esto significa que la neocorteza permite procesar la información de manera compleja, resolver problemas y adaptarse a situaciones cambiantes del entorno.

¿Cómo se interconectan los tres cerebros?

Cabe mencionar que los tres cerebros interactúan entre sí constantemente, están interconectados y se influyen de manera recíproca. Para entenderlo con un ejemplo, las experiencias que vivimos y las respuestas emocionales consecuentes desencadenan reacciones en el cerebro reptiliano y límbico, mientras que la neocorteza regula y controla dichas respuestas.

En definitiva, la armonía que existe entre los tres tipos de cerebro es fundamental para regular nuestro bienestar y equilibrio emocional.

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